Se desconoce la fecha exacta y la hoja de ruta aún está por concretar, pero Barcelona ya ha desencallado su gran deseo desde que empezara a circular hace ya 15 años: unificar el tranvía.
La propuesta de conexión del tranvía por la Diagonal por parte de Barcelona en Comú, con el respaldo del Ayuntamiento de Sant Adrià de Besòs, ha sido sometida a votación en el pleno de este mes de enero en la casa consistorial barcelonesa con final feliz para sus deseosos.
Tras revelarse que el 62,9 % de los barceloneses apoyan esta propuesta, según los datos del Barómetro municipal, la alcaldesa de la capital catalana, Ada Colau, volvió a proponer esta firme apuesta en el pleno de enero.
En abril de 2018, la luz verde que se pretendía encender se tiñó de rojo con la oposición de ERC, quien no acabó de ver que el proyecto repercuta integramente en las arcas municipales. Poco más de medio año después, el voto de los republicanos ha dado un giro de 180 grados y su voto ha sido determinante para lograr la mayoría necesaria. “Es un acuerdo para que esta infraestructura de un paso adelante y pueda tirar adelante, pedimos a la ATM que desarrolle un convenio y cuando lo veamos decidiremos como y cuando lo hacemos”, se apunta desde Barcelona.
La primera fase de obra consistirá en el tramo entre la plaza de las Glòries y Verdaguer y un coste global de 182 millones de euros, aunque la previsión de ubicar carriles y catenaría en 2020, como establecían los planos iniciales, se deberá posponer a un calendario aún por definir.
